Batman: Año Uno.
Cuando puse el post de Batman: Arkham Asylum me anime y pense que igual estaría bien ir colgando post con las joyitas de los comic de Batman. Para la gente que no tiene tiempo o ganas de leerse cientos de comic del murciélago. En unos cuantos post encontrará esos comic que han marcado un hito en la vida de este carismático superhéroe. Hoy os traigo el Batman: Año Uno de 1988.
En Batman: Año Uno se nos cuenta una vez más el origen del personaje pero adaptado a un momento más actual. En él, no solo veremos como Bruce Wayne va transformándose en Batman, también veremos al futuro comisario de Gotham, James Gordon. Es una historia contada desde dos puntos de vista, una protagonizada por Bruce Wayne y otro por James Gordon. Batman como ya he dicho ira convirtiéndose en Batman, haciéndole dudar de si es la máscara su alter ego o al revés. Mientras Gordon luchará por mantenerse íntegro con la presión de su familia, por la que teme que sufran por sus decisiones. También veremos apariciones de Catwoman o la presentación del mafioso Carmine Falcone. La historia abordará como trama principal la corrupción política sin que aparezcan los clásicos villanos del murciélago, tal vez esto es lo que le de ese toque genial a la historia. No hacen falta psicópatas, ni enemigos con capacidades especiales para crear una historia épica entre el bien y el mal.
Batman: Año Uno
Tanto Frank Miller como David Mazzuchelli se encontraban en su mejor momento cuando realizarón este trabajo. Frank Miller quien no necesita presentación creo una historia sobria, rotunda y compacta sin grandes efectos narrativos, simplemente con una narracion profunda con mucha influencia del genero negro. Puede dar la sensación de encontrarnos viendo una de esas películas en blanco y negro clásicas sobre mafiosos y detectives. Ese uso escesivo de la narración en tercera persona que más tarde daría origen a su saga más conocida, Sin City. Es posible que cuando salió este comic a la venta ya le estuviera dando vida a la famosa saga. David Mazzuchelli por necesidades del guión restructuro su forma de dibujar hasta el punto de crear una nueva manera que es la que veremos en el comic. A partir de aquel momento esta estética será la oficial en los comic de Batman. Hay quien dice que es su mejor trabajo y que nunca pudo igualarlo. Volvería a trabajar con Frank Miller en Daredevil: Born Again. Su dibujo destaca por la unión entre la mancha y la línea. Este estilo en este comic encontro su definición que a partir de este momento se volverá normal dentro del mundo del comic. Frank Miller lo utilizará en sus obras posteriores, por ejemplo, en los 300.
